Estigma social.

estigma socialEl estigma social es el rechazo a aquellos a quienes se percibe como diferentes, estableciendo las categorías de personas que son aceptadas o no. Donde a través del lenguaje y los comportamientos se reproducen y legitiman estereotipos y prácticas de discriminación. El espacio público multitudinario se convierte en el escenario idóneo para el maltrato, la humillación y la ridiculización de los considerados diferentes. Los insultos racistas que recibió el futbolista Vinícius Jr. el pasado domingo en los prolegómenos y durante el partido de fútbol entre el Valencia y el Real Madrid expuesto a situaciones de burlas, ofensas y denigración por el color de su piel, sus rasgos y todo aquello que evoque y visibilice su herencia africana como inferior y primitiva. Un evento deportivo se convierte en un espacio público donde amparándose en una supuesto anonimato, un grupo de personas reproducen estereotipos y ponen en práctica una actitud claramente racista.

El racismo supone el desprecio hacia otros grupos étnicos por el color de su piel, sus rasgos faciales o sus costumbres y tradiciones por considerarlas inferiores. Incluso podemos añadir el odio que nace a partir de prejuicios que se apoyan en falsas creencias y en tópicos. Tanto el racismo, como la xenofobia, que entraña el rechazo hacia el extranjero que procedente de fuera y se incorpora a nuestra comunidad, están íntimamente unidos y tienen una base estigmatizadora. No es cuestión de plantearse ¿si todos somos racistas?, porque todos tenemos alguna manifestación de racismo, aunque sea sutil. Donde determinadas prácticas racistas no se cuestionan y se asumen como normales y cotidianas. Muchas personas no se consideren a sí mismos como racistas; sin embargo, ellos mismos son los que reproducen tanto los significados como las prácticas racistas. Y, mucho más cuando están en grupo y se sienten más seguros en su estigma social.

No hemos sido capaces de perder los prejuicios, la sociedad sigue saturada de mensajes racistas, de odio a lo diferente. Todo confirma la preponderante presencia del racismo y el estigma en la sociedad difundiendo un estereotipo social. No estamos orgullosos de crear una sociedad verdaderamente intercultural e igualitaria, donde nos hemos acostumbrado a que el diferente por el color de su piel, por sus rasgos faciales o sus costumbres y tradiciones es el raro, no se consideran gente normal. Son esas personas que cuando las ves crees que te van a robar la cartera. Las que revisan en las tiendas, a las que no alquilan un piso, las que crees que son las que despachan, hacen tareas de limpieza o cuidan a nuestros hijos y mayores. A los que por color de piel pones en duda que sean españoles… Todo es racismo, igual que el defender los intereses de su grupo tribal, llámese club de fútbol, atacando a un futbolista rival.

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