Pablo Casado, ha sido elegido este sábado, como el presidente nacional del PP. «Vuelve el PP», anunció, triunfante, tras conocer su victoria Pablo Casado. No especificó a qué PP se refería, aunque se supone que se refería a esa derecha neoconservadora, orgullosa de su pasado: de la guerra de Irak, del Prestige, de la gestión del 11-M, de todas las esencias de la derecha respecto a medidas económicas, derecho a la vida, educación o libertad de expresión.
Una derecha más cerca del último Aznar, queriendo olvidar los años de Rajoy. No les interesa la memoria histórica ni la exhumación del cadáver de Franco. Ni las reformas de la Constitución, ni mejorar la democracia. Pretenden ser la derecha de una España con banderas en los balcones, con más servicios privatizados, con una educación concertada y con reformas que permitan más precariedad en sueldos y pensiones. Con más restricciones contra la migración. Una derecha que probablemente aumentará sus perspectivas de voto, entre el PP y Ciudadanos.
No es la derecha del yugo y las flechas, pero es esa derecha con comportamientos del pasado. Tienen un anti-izquierdismo instintivo que les lleva a atacar cualquier cosa que la izquierda defienda y que la convierten en el culpable de todos los males. Nos recordarán que ellos en tiempos de Aznar consiguieron un altísimo crecimiento económico, que crearon 7 millones de puestos de trabajo y convirtieron a España en la octava economía mundial. No nos hablarán de que el boom económico, acabo con una burbuja inmobiliaria española y una crisis de la banca y económica que reventó con el gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero.
La receta es clara: que Cataluña sea el tema central de las próximas elecciones generales. Vuelve el PP más conservador, ganador, con un nuevo liderazgo y sin complejos de derecha. Un partido que después de sus primarias ha sacado a la luz las dos almas del partido, la perdedora compuesta por Soraya Sáenz de Santamaría y heredera de Rajoy y la encarnada por Pablo Casado y su deseo de emular a José María Aznar. Vuelve la derecha, vuelve el PP…
Pablo Casado es el que está “convencido de que la mayoría de jóvenes españoles son del PP y aún no lo saben” el que dijo que: «Los de izquierdas son unos carcas, todo el día con la fosa de no sé quién, con la memoria histórica». El que piensa que en Mayo del 68 los:» jóvenes en París destrozaban las calles porque se aburrían y porque querían implantar la sociedad socialista”. El que comparó a Podemos con Syriza y habló de una situación en Grecia que no era cierta, afirmando que había una «ola inusitada de violencia en Grecia», El que publicó en Twitter un vídeo del Congo como si fuera Venezuela, como asunto recurrente en el debate político. El que dice que “Estoy muy orgulloso de Aznar». El que aprobó en 2007 la mitad de la carrera de Derecho, nada más lograr su primer escaño como diputado y la otra mitad había tardado siete años. El que cursó un máster que pese a ser un curso presencial, no se le exigió ni hacer exámenes ni ir a clase, ni estar obligado a presentar ningún Trabajo Fin de Máster. Ese es el nuevo presidente del PP y el que si los votantes no lo remedian será el futuro presidente del gobierno de España.