En una sociedad avanzada, la reforma de las pensiones es una necesidad ante envejecimiento paulatino de la sociedad y al gasto público que lleva asociado en materia de sanidad y cuidados, Las pensiones son necesarias para poder asegurar el estado de bienestar, insostenible sin derechos sociales como la sanidad, la educación, las pensiones o los subsidios por desempleo. Dicen los expertos que el actual sistema público de pensiones es insostenible y parece que su reforma es imprescindible. Esto obliga a incrementar gradualmente las cotizaciones, aumentar la edad de jubilación, recortar las pensiones o una combinación de las tres medidas. En España, se ha llegado al acuerdo de la reforma de las pensiones en la mesa de diálogo social, sin respaldo de la patronal y con el acuerdo con la Comisión Europea. Dicha reforma garantiza el sistema público de pensiones, reforzando y fortaleciendo su financiación, reduciendo la brecha de cotización y mejorando el período de cálculo.
En la actualidad, con la generación del “baby-boom” en edad de jubilarse significa que la carga financiera de las pensiones puede comenz a ser insostenible. La cuantía de las pensiones está en relación con el número de trabajadores cotizantes, temas como la forma de cálculo, las cotizaciones pagadas durante la vida laboral y la duración de la vida. Porque el actual sistema se concibió a principios del siglo XX para una población que trabajaba 35 años y vivía alrededor de 5 años una vez jubilada. Pero, ahora la realidad es totalmente diferente. El problema es que no existe una relación entre el desembolso hecho por el trabajador o por las empresas y las pensiones que recibe. Si además añadimos las pensiones de viudedad, las no contributivas, invalidez,etc.
Es necesaria una reforma de las pensiones para evitar los planes de pensiones privados como única solución alternativa a las prestaciones del sistema público. Las pensiones deben ser una prioridad para los Estados como cumplimiento de un derecho, sin embargo parece que exista un interés por reducir las protecciones sociales, utilizando la crisis para conseguirlo. El déficit y la deuda de los Estados, la problemática de obtener más ingresos sino es a consta de subir más los impuestos y un envejecimiento imparable, hace que las pensiones sean una incógnita para las generaciones venideras. Donde la derecha tiende a ir hacia un modelo de tipo anglosajón, con un intento de desmontar el Estado del bienestar, teniendo un mínimo para los más pobres y todo lo demás, privado.