La utilización indecente y partidista de ETA por el PP, en el debate del estado de la nación, es una forma machacona de intentar deslegitimar al Gobierno de Pedro Sánchez por sus «pactos» con Bildu y decir que gobierna con los terroristas. La portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, ha comenzado su réplica durante el Debate del Estado de la Nación pidiendo un minuto de silencio en memoria de Miguel Ángel Blanco, utilizando indecentemente el 25 aniversario de su asesinato a manos de ETA. Porque el PP se apropia de la utilización del terrorismo de ETA, se hace portavoz único de sus víctimas y utiliza el lazo azul que simbolizó la unidad ciudadana contra el terrorismo para atacar la nueva Ley de Memoria Democrática, que tiene el apoyo de Bildu y que avisan con derogar cuando lleguen al poder. Para el Partido Popular el terrorismo de ETA, que el 20 de octubre de 2011 ETA anunció su “cese definitivo”, le parecíó el tema que más importaba a los españoles.
El nacimiento de ETA, en julio de 1959, representó la reacción contra la política represiva del régimen de Franco y un movimiento de liberación nacional que aunaba la lucha nacional y de clases. ETA se convirtió en la referencia fundamental de la lucha contra la opresión franquista dentro y fuera del País Vasco. La acción de ETA pasó de una lucha callejera a una escalada violenta basada en el terrorismo que mató a víctimas inocentes, más de 3000 atentados y 800 personas asesinadas en medio siglo de actividad terrorista, miles de heridos y víctimas del terrorismo. Pero, todo esto acabó el 20 de octubre de 2011, en que ETA anunciaba el cese definitivo de su actividad terrorista. Un detalle que parece que aún muchos no se han enterado. No es pedir que se olvide o se perdone el terror y el dolor, es asumir que la banda terrorista ETA anunció su disolución, porque estaba totalmente derrotada policial y judicialmente. La democracia ganó a ETA.
La utilización indecente como arma política arrojadiza de ETA y de querer por parte de la derecha, de querer vincular nacionalismo, separatismo y terrorismo. El tema de ETA es una cuestión solo de justicia, que los terroristas cumplan con la sociedad y con la ley. Nadie debería utilizar el terrorismo para conseguir votos, ni olvido ni perdón simplemente justicia. Y, no olvidar que en nuestro sistema penitenciario, una persona que mata, cumple su condena y se reinserta. Cuando ETA ha dejado de matar, hay que dejar de vincular a partidos como Bildu, con el argumento de que apoyaban directamente a ETA. Mientras una parte de los políticos y de la sociedad civil consideren que la izquierda abertzale, e incluso los presos y antiguos miembros de ETA, son una amenaza para la democracia y la paz, estaremos teniendo la herida abierta del odio.