Netanyahu confirma su plan: ocupar toda Gaza. En la mitología griega Ares hijo de Zeus y Hera, era el dios de la guerra, la mitología lo retrata como un ser amoral, despiadado y cobarde, instigador de la violencia, mal amigo y asesino sangriento. El primer ministro israelí emulando a Ares, dios griego de la guerra, ha dejado claro que su objetivo es la ocupación total y destrucción de la Franja de Gaza, con dicha ignominia acaba con cualquier posibilidad de un Estado palestino. Israel, ha castigado el atentado terrorista de Hamás del 7 de octubre de 2023, en que murieron más de mil muertos y 200 rehenes, con más de 52.000 muertos en la Franja de Gaza, la mayoría niños y mujeres. Israel mantiene su presión militar en Gaza, Cisjordania, el Líbano y Libia, haciendo un genocidio sistemático y una limpieza étnica del pueblo palestino, con el único objetivo de borrar a Palestina del mapa.
Fue Hamás quien perpetró el atentado del 7 de octubre de 2023, en el Festival “Tribe of Nova”, fue Hamás quien asesinó a más de mil personas a tiros y a golpes. Para Israel no ha sido solo una venganza, es la culminación de un proceso de colonización y ocupación prolongados a lo largo de 77 años, desde la fundación del Estado de Israel, donde las políticas de ocupación y colonización ilegal por parte de Israel han consolidado un sistema de apartheid contra el pueblo palestino. La ignominia de ocupar toda Gaza acaba con la esperanza de los dos Estados: Israel y Palestina, es la continuación de la violación de los derechos humanos por parte de Israel. La ocupación por parte de Israel, puede ser el prolegómeno al plan de Donald Trump de convertir Gaza en la «Riviera del Medio Oriente».
Ocupar toda Gaza, supone que más de dos millones de gazatíes serán desplazados a terceros países, que vulnera el derecho de retorno de la población palestina a su territorio y propiedades. La mayor vergüenza, la peor ignominia es el desinterés de la comunidad internacional a nivel humanitario por los palestinos, que sigue sin reconocer el Estado de Palestina, que la mayoría de países siguen con las exportaciones e importaciones de material militar y armamentístico. Y, el apoyo constante de Estados Unidos al Estado de Israel, respaldando el genocidio del pueblo de Gaza, impensable en un pueblo judío que sufrió el Holocausto.
La guerra es una vergüenza de la humanidad, nada justifica el uso de la violencia. Sin embargo siguen produciéndose guerras, aunque la totalidad de la sociedad civilizada está en contra de las guerras. Sin embargo, se producen de forma continua y se añaden al sufrimiento que sufren millones de seres: el hambre, las enfermedades, los desastres naturales, la desigualdad, las crisis migratorias, el racismo, el machismo y el odio. Donde parece que lo más importante para los países ricos es vender armas, sin importar sus consecuencias. Donde hay demasiados personajes que se consideran superiores a todos los demás seres, se sienten libres para imponer su voluntad y sus deseos: llámese Netanyahu, Putin, Trump o cualquier otro déspota. ¿ Nadie piensa hacer nada para evitarlo ?