He trabajado en siete comunidades autónomas de España, siempre me ha perseguido la misma pregunta: ¿de dónde es usted? Siempre he respondido con una sonrisa y con ironía: ¡Todos tenemos algún defecto: soy catalán! No es que no me sienta orgulloso de ser catalán, es que siempre me ha llamado la atención el interés de la gente en encasillarte, en poner etiquetas. Soy ciudadano del mundo, vivimos en una aldea global.
Sócrates se caracterizaba por usar la ironía para “ridiculizar” los argumentos contrarios a los suyos. Siempre me ha gustado la ironía, aparentar no saber absolutamente nada, dar a entender lo contrario de lo que se dice. La ironía contiene una sutil burla o comicidad, molesta a los que la entienden y a los que no también. Incluso algunos piensan que es una forma de quedarse en lo superficial y no entrar en lo importante.
Hoy jornada de reflexión de las elecciones autonómicas catalanas, con un sentido plebiscitario que dicen que no es legal, pero que todo el mundo parece que lo ha aceptado, mucha gente se pregunta ¿qué pasará mañana? Respondo desde mi mayor ignorancia e ironía: ¡mañana, no pasará nada!
Aunque ganen Junts pel Si, no habrá proclamación de la República Catalana, como en aquel 6 de octubre de 1934, cuando el presidente del Gobierno catalán Lluis Companys, proclamó el Estat Catalá y el presidente del Consejo de Ministros, Alejandro Lerroux, promulgó el estado de guerra, entraron en el Palacio de la Generalidad y detuvieron a Companys y a parte de su gobierno. Se clausuró el parlamento autonómico y la suspensión del Estatuto de Nuria, comenzando una fuerte represión a Catalunya por parte del gobierno de Lerroux. La república independiente catalana había durado diez horas.
No sabemos si ganaran los independentistas, si será por el número de escaños o por el porcentaje de votos, sabemos que si ganan Junts pel Si, no será una declaración formal de independencia, sino un inicio del proceso de secesión con la voluntad de negociar con el Gobierno español, que culminaría al cabo de 18 meses con unas elecciones constituyentes y la aprobación de una nueva constitución catalana en referéndum. Mañana, tendremos la respuesta de los catalanes.