La pobreza, la desigualdad y la falta de derechos son formas de injusticia social. Injusticia como mala distribución de los bienes materiales o recursos de otro tipo. Según el informe de Oxfam Intermón: «La ley del más rico» el 1% más rico del planeta posee más riqueza que el 95% de la población mundial en conjunto. Frente a erradicar la pobreza extrema para todas las personas en todo el mundo para 2030 es un objetivo fundamental de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible. Según la ONU, alrededor de 700 millones de personas viven con menos de USD 2,15 al día, pero, aparte de la pobreza extrema existe la otra pobreza, cuando el total de ingresos disponibles no satisface el mínimo necesario para la subsistencia.
La riqueza está creciendo constantemente en todo el mundo, aunque a diferentes velocidades, según el Informe sobre la riqueza mundial 2024 de UBS, que ya va por su 15.ª edición, hay en el mundo cerca de 58 millones de personas que son millonarias. Después están los supermillonarios, 2.664 personas en el mundo poseen más de 1.000 millones de dólares, 12 personas en el mundo tienen entre 50 y 100.000 millones de dólares y 14 personas tienen más de 100.000 millones de dólares de patrimonio. Los 10 hombres más ricos del mundo poseen más riqueza que los 3.100 millones de personas que componen el 40% más pobre de la humanidad, según Oxfam Intermón. ¿Cuántos miles de años necesita un trabajador, para obtener el patrimonio de la persona más rica del mundo ? Elon Musk, consejero delegado de Tesla y SpaceX, su fortuna asciende a 243.700 millones de dólares.
En esta sociedad capitalista todos tenemos el objetivo de ser ricos, como el clásico «Si yo fuera rico» del musical «El violinista en el tejado» , de 1964, satirizando la ostentación y los privilegios de las clases altas y soñando con todas las cosas que podría hacer si fuera rico. El sistema capitalista solo quiere ricos, menosprecia a los pobres y considera que no hacen lo suficiente para dejar de ser pobres. Todos somos iguales ante los ojos de Dios, pero no es menos cierto que existen pobres y ricos.
Las desigualdades económicas hacen que unas pocas personas acumulen poder y riqueza, desigualdad entre personas y entre territorios. El sur global «solo cuentan con el 31% de la riqueza global», pero representan el 79% de la población. La injusticia social está en los niveles sin precedentes de desigualdad social, en este modo de producción y las consecuencias sociales y humanas que genera el capitalismo. El capitalismo nos vende la posibilidad de un crecimiento ilimitado, pero los recursos del planeta son limitados. La solución está en un reparto justo de la riqueza, en la responsabilidad de la destrucción del planeta causada por unos patrones de consumo, producción y beneficios. Lo dicho «el 1% más rico del planeta posee más riqueza que el 95% de la población mundial en conjunto».