La extrema derecha reivindica el ataque a Pedro Sánchez en Paiporta, que le han dado con un palo en la espalda y después han atacado su vehículo. Unos grupúsculos fascistas se han mezclado entre los vecinos de Paiporta que han increpado y les han lanzado barro a los reyes, al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; y al de la Generalitat valenciana, Carlos Mazón. Se puede entender la desesperación y el dolor de los valencianos después de 210 fallecidos por la DANA en Valencia, de la destrucción y del retraso en las ayudas. Se puede plantear la inconveniencia del viaje de los reyes y además acompañados por Sánchez y Mazón, que quizás se hubiera criticado de igual manera si no hubieran realizado dicha visita.
Lo que no puede permitir la sociedad española y valenciana es un ataque a la Jefatura del Estado y al Presidente del Gobierno por unos fascistas y nazis. Probablemente los mismos fachas de la derecha y la ultraderecha española que acudían a los aledaños de la sede del PSOE en Madrid para pedir la dimisión y apalear un muñeco de Pedro Sánchez. Hemos vivido en Paiporta la indignación y abandono de la ciudadanía, pero también la manipulación en redes sociales y en las calles de Paiporta de grupúsculos fascistas para atacar nuestra democracia. La democracia tendrá imperfecciones, los políticos tendrán incompetencias, errores y comentarios desafortunados, pero estos fascistas lo único que quieren es aprovecharse del dolor y desesperación para destruir las instituciones y la democracia en España.
Los políticos han demostrado su ineptitud y su egocentrismo ante una catástrofe: después de seis días, siguen estando las calles impracticables, sin la llegada de los medios necesarios, con la carencia de lo más imprescindible (luz, comida, agua, material de limpieza,etc), sin saber el número de desaparecidos, con una lista abierta de fallecidos, con una destrucción que necesitará mucho tiempo y mucho dinero para reparar todo este desastre provocado por la DANA. Ni se puede entender la torpeza de la Generalitat Valenciana ante una catástrofe, ni se pueden aceptar declaraciones engreídas de Pedro Sánchez emplazando a Mazón: «Si necesita más recursos que los pida». Ni se puede aceptar que Feijóo vaya a malmeter diciendo: «En una emergencia nacional ningún gobierno espera, sino que actúa”.
Quizás debería haber muchas dimisiones, quizás las urnas deberían castigar muchos errores que han costado vidas. Pero, lo que nunca debemos permitir los españoles y los valencianos, es que unos fascistas y nazis, decidan nuestra democracia, además con el apoyo velado de partidos como Vox. Si la sociedad no reacciona, podemos estar muy cerca de levantar el brazo, cantar himnos fascistas y quedarnos sin libertad y democracia. Solidaridad con los valencianos y repulsa total a la violencia y manipulación fascista.