El «oxi» de los griegos.
El nai (sí) se presentaba como la opción de la derrota, del acatamiento a poderes exteriores, mientras que el oxi (no), era el orgullo de la independencia como país. Ayer domingo los griegos hicieron un ejercicio de democracia, a pesar de llevar los bancos cerrados una semana y de las advertencias de la Unión Europea. Un referéndum para saber la opinión de los griegos, creando un valioso precedente para el resto de europeos. La inmensa mayoría de los griegos votó OXI (No), por una diferencia de casi 20 puntos. La deuda griega, estimada en casi 400.000 millones euros, equivalente al 180% del PIB de Grecia es insostenible, el referéndum es el apoyo mayoritario del pueblo griego a las posiciones que el Ejecutivo de Alexis Tsipras defiende en Bruselas. El "oxi" ha sido un no a más recortes y un si a auténticas reformas, querer acabar con la austeridad y encontrar una forma…