La autoexigencia está aumentando.
La autoexigencia en nuestros políticos, está aumentando. Pero, no es por querer hacer las cosas bien y esforzarse para ello, tanto en sus comportamientos públicos y privados; simplemente porque las supuestas irregularidades, las mentiras, el hacer las cosas mal, les está obligando a dar ejemplo y a dimitir. La autoexigencia debe comenzar en analizar en que nos hemos equivocado, rectificar y asumir el fallo dimitiendo. Se puede dimitir en política por muchos motivos: por mentir; por dar positivo en un control de alcoholemia; por sobrepasar la velocidad en una zona limitada; por plagiar una tesis; por escándalos de corrupción; por mala gestión; por relaciones intimas; por ser desautorizado y desacreditado por sus superiores... Pero, lo más importante es que se dimita, si la gente se lo exige con motivos. En España, que un político asuma responsabilidades y presente su dimisión, es bastante complicado. Se atrincheran en la absoluta anomalía de no aceptar que una…