La desinformación constituye una de las mayores preocupaciones de los países democráticos. Detrás de las noticias falsas o fake news se articulan, en numerosas ocasiones, estrategias para manipular la opinión pública y erosionar la estabilidad de los Estados y de sus instituciones.
Los 10 Mandamientos de la ley de Dios, son el decálogo que Dios dio a Moisés en el Monte Sinaí. El Catecismo de la Iglesia Católica explica que los 10 mandamientos expresan los deberes fundamentales del hombre hacia Dios y hacia su prójimo. El Octavo Mandamiento dice: "No darás falso testimonio ni mentirás". La capacidad de mentir no está determinada por la creencia o no creencia en Dios, es un comportamiento humano poco ético que puede tener diversas motivaciones, desde protegerse a sí mismo hasta dañar a otra persona. Las mentiras, los bulos y las desinformaciones son lo mismo, sabemos que no son verdad. Quizás no sean ilegales, pero generan alarma social. Está claro, que si las mentiras fuesen ilegales, habría aún más personas en las cárceles. El viernes pasado, el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, durante su declaración como investigado en el Tribunal Supremo, negó su participación en la…
Pedro Sánchez defiende en el Congreso su plan de calidad democrática para combatir la desinformación y los bulos, lo que significa de una u otra manera regular la actividad de los medios de comunicación. Lo que está claro es que la desinformación existe por parte de ciertos medios y que persigue persuadir a una determinada opinión pública en beneficio de determinada ideología y partidos políticos. En democracia la ciudadanía es quien otorga la legitimidad del poder, si la convencemos con mentiras, podemos orientar o cambiar su voto e incluso no respetar principios y derechos democráticos. Cuando se dice "combatir la desinformación", estamos hablando de libertad de prensa, expresión e información gozan de protección en la Constitución Española (CE), en su Artículo 20 reconoce los derechos a "expresar y difundir libremente los pensamientos, ideas y opiniones mediante la palabra, escrito o cualquier otro medio de reproducción" y "comunicar o recibir libremente información veraz por cualquier…
Las noticias falsas están en aumento, cada vez es más difícil, distinguir la información de la desinformación. Los medios de comunicación no pueden ser libres, ni éticos ni neutrales, porque la ética define lo que es bueno o malo, obligatorio o permitido aplicable a las personas no a las empresas. Y, la neutralidad no está en los principios económicos de una empresa, porque en un medio de comunicación la independencia depende de su accionariado y de los clientes que contraten su publicidad. La desinformación, la manipulación y su autocensura, están al servicio de unos intereses muy concretos, por lo tanto no son libres. Los medios de comunicación conforman la opinión pública a sus intereses, en todos los temas que tocan, los medios crean desinformación, según la línea ideológica del medio. Se dicen algunas verdades, se callan otras, se ofrecen unos datos y se ocultan otros. Muchas veces se queda todo en lo superficial,…