Las colas del hambre como futuro cierto.
Las colas del hambre, colas de personas en todas las ciudades para recoger bolsas de comida, son cada día más y más largas, como consecuencia de esta crisis sanitaria y económica del coronavirus. Son los nuevos pobres, quizás muchos lo sean ya desde la crisis económica de 2008, pero después de estos casi cien días de alerta sanitaria, miles de españoles y de inmigrantes han visto que han desaparecido sus ingresos y que se han visto obligados a recurrir a comedores sociales, bancos de alimentos, parroquias, asociaciones de vecinos y a diversas ONG para poder comer. Un presente cierto, del que en el futuro, nadie está a salvo. Y, lo dice alguien que sabe de los cambios que se pueden producir en una vida de éxito, porque yo fui un indigente, que por orgullo y por estar solo, nunca fue capaz de pedir nada a nadie. Estas colas del hambre son de…
