«S’hauria de parlar menys de canvis d’horaris i més de l’hora del canvi” (Quizá debería hablarse menos de cambios de horarios, y empezar a hablar de la hora del cambio) Con esta palabras acabó su intervención, en la sesión de control de este miércoles, la portavoz en el Congreso de Junts per Catalunya, Miriam Nogueras. Sin pedirle la dimisión, ni la amenaza de apoyar una moción de censura, Nogueras aprovechó la propuesta de Sánchez a la Comisión Europea, sobre el fin del cambio de hora, para decirle que lo estaba empleando para tapar los problemas sociales y de corrupción, insinuando a Pedro Sánchez que se le acaba el tiempo.
Desconocemos si es un farol de Junts o realmente no lo es. La portavoz de Junts dijo que «la gente está hasta las narices de todo»: la falta de avances en materias como las dificultades económicas de los autónomos, la exigua construcción de vivienda pública en Catalunya, la regulación del alquiler de habitaciones, las ocupaciones de vivienda o los retrasos en los trenes. El voto de Junts es decisivo para la aprobación de unos supuestos presupuestos del Estado y para la aprobación de cualquier ley.
La hora del cambio de Junts no incluye una moción de censura, pero el partido consultará a su militancia si debe seguir apoyando o no al Gobierno. Que de hecho es lo mismo, que el Gobierno se desangre poco a poco en cada votación o se sometan a una moción. Todos sabemos que Puigdemont quiere apretar a Pedro Sánchez, pero la duda es si realmente quiere que llegue la hora del cambio, con el PP y Vox en el Gobierno.
El próximo lunes está convocada una reunión de la ejecutiva de Junts, en Perpiñán, Francia. Junts un partido nacionalista catalán de derechas, no puede apoyar a un Gobierno progresista, sin perder votos en su nicho de votos. Junts tiene en Catalunya un partido como Aliança Catalana, que tiene un discurso radical y sin complejos, que defiende un independentismo catalán de extrema derecha y que les está quitando votos. El Gobierno depende del voto de Junts y mientras Junts apoye a Pedro Sánchez, va perdiendo apoyos en el independentismo.
La cuerda se romperá por el lado más frágil, cuando el Gobierno se convenza que es imposible gobernar de esta manera. Será el momento en que el presidente del Gobierno decidirá cuando se convocan elecciones generales. La hora del cambio llegará para el PSOE, pero también para Junts, su futuro está complicado con un futuro gobierno de PP y Vox. La madrugada de este domingo, será a lo mejor, el último cambio de hora. Ahora, nos toca esperar qué cambiará…