El dedazo.
El dedazo es una regla no escrita en política pero que la utilizan todos los partidos, consiste en que un político o servidor público designa a su sucesor o colaborador sin seguir ningún proceso democrático o concurso de valoración de aptitudes. El dedazo es tan viejo como el día que Calígula nombró cónsul de Bitinia a su caballo Incitatus, en una actitud de claro menosprecio hacia las instituciones y senadores de Roma. Con el dedo se ha destituido a Tomás Gómez Secretario General del Partido Socialista de Madrid (PSM), que era el candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, sin celebrarse ningunas primarias internas, ya que los otros dos aspirantes a este puesto, habían quedado muy lejos de conseguir el 10% de los avales que se necesitaban para concurrir a este proceso interno. Por sus desastrosos resultados electorales pasados y encuestas actuales, por los casos de posible corrupción (sobrecoste tranvía…
