Credibilidad en la clase política.
La credibilidad en la clase política está perdida, pero rechazar la política y los políticos no es la solución. El ciudadano pide nuevas formas de hacer política, con y sin los partidos. Decía Platón que: "el precio de desentenderse de la política es ser gobernado por los peores hombres". ¿Quizás nos hemos desentendido demasiado? Hemos de exigir a nuestros políticos que cumplan con su deber: el servicio público y la defensa del interés general. Además, el ciudadano tiene que estar presente en las decisiones de los gobernantes, ya que el hecho de votarles no significa que tengan patente de corso. Existe una mala percepción ciudadana de la democracia, los partidos políticos y los órganos de representación; sin embargo, la democracia es la única que garantiza la libertad e igualdad como principios básicos del Estado. El objetivo de un partido es querer hacer algo y ganar en las elecciones para poder llevarlo a…
