La sociedad del egoísmo indiferente.
Vivimos en la sociedad del egoísmo indiferente. Una sociedad individualista, donde prevalecen los principios egoístas e insolidarios: el sentido de lo realmente importante, es si genera un beneficio propio medible. No merece nuestro tiempo y dedicación, algo que no es importante, que no me afecta, que no me perjudica ni beneficia. Nuestras sociedades ricas se basan en el individualismo, en el consumismo, el hedonismo y en un egoísmo indiferente hacía los más próximos y los desconocidos. Es la cultura del yo, en la que nos amamos a nosotros mismo y odiamos a los demás. Donde estamos rodeados de indiferentes, de personas sin sentimientos, ante las injusticias y la violencia. Donde sólo se importan ellos, nadie más. La sociedad ha conseguido que no sean solo los indiferentes, los ricos y millonarios, indiferente hacia los demás, puede ser cualquiera que tengamos cerca. El capitalismo es un sistema económico, no es un sistema de justicia…